Esta noticia puede resultar extraña o demasiado moderna: candado Skylock se puede considerar una forma de objetos conectados, batería capaz de durar hasta ocho meses con una carga; pero además dispone de un pequeño panel solar para mantener la batería constantemente cargada: una hora de luz solar equivale a una semana de carga eléctrica.
Además el candado puede conectarse a una red wifi o directamente al móvil a través de Bluetooth LE, de muy bajo consumo. Aquí está la clave del asunto —nunca mejor dicho— porque el candado se desbloquea desde el teléfono, de forma similar a como algunos coches pueden abrirse sin tener que sacar la llave del bolsillo; aunque en caso de necesidad, o de no tener el teléfono, el candado se puede desbloquear directamente tecleando el código.
La aplicación móvil del candado Skylock permite, por ejemplo, autorizar a otros teléfonos a abrir el candado, de tal modo que no es necesario disponer de las llaves para permitir que otra persona abra el candado y utilice la bicicleta. O permitiría, por ejemplo, compartir con otras personas diversos candados repartidos por la ciudad sin tener que cargar con ellos.
La autorización se puede retirar de forma remota en cualquier momento; algo parecido se puede hacer con candados de combinación enviando la clave por WhatsApp.
Detectar robos y accidentes
Otra función interesante en parte del candado Skylock es que dispone de un sensor de movimientos que puede enviar un mensaje de alerta al teléfono del usuarios si detecta movimientos o vibraciones, por ejemplo si alguien mueve la bicicleta o si se intenta cortar el candado.
Ese mismo sensor de movimiento puede detectar cuándo el ciclista sufre una caída o un accidente y, de forma parecida al casco de bicicleta que llama a emergencias si tienes un accidente, envía el aviso al móvil que a su vez puede efectuar la llamada de socorro en caso de ser necesario; es decir, si tras el impacto el ciclista no atiende el mensaje del móvil.